Poema Consumación de Vicente Aleixandre

Consumación

de Vicente Aleixandre


Si yo fuese un niño,
si yo fuese un niño, redondo, quieto y sumergido.
Sumergido, no; sacado a la luz, estallado hacia fuera, exhibido enesa otra Creación donde un niño es un niño en su reino.
Pero si sumergido estuve antaño, bajo las aguas de la luz queeran cielo y sus ondas,
hoy no puedo sino decirlo, tomar nota, procurar explicarlo,
prohibiéndome al mismo tiempo la confusión de lo queveo con lo que fue y ha sido.
Todavía el hombre a veces intenta explicar un sueño,dibujando la presencia del amor,
el límite del corazón y su centro justísimo.
Aún intentar decir: «Amo, soy feliz; me conformo.»
Que es tanto como decir: «Soy real.» Pero cuando las hojastodas se han caído:
primero las flores, luego los mismos frutos, más tarde el humo,el halo
de persuasión que rodea a la copa como su mismo sueño
entonces no hay sino ver aparecer la verdad, el tronco último,el
despojado ramaje fino que ya no tiembla.
La desnudez suprema del árbol quedado
que finísimamente acaba en la casi imposible ramilla,
tronquito extremo sin variación de hoja,
superación sin música de la inquietante rueda de lasestaciones.

Entonces llega el conocimiento, y allá dentro en el nudo delhombre,
si todavía existe un centro que tiene nombre y que yo no quieromencionar;
si aún persiste y exige y golpea imperiosamente, porque nadiequiere morir,
puedes sonreír de buena gana, y burlarte, y mirándolocon desdén quiere morir,
decir con voz muy baja, de modo que todo el mundo te oiga:
«Amigo...: todo está consumado».


Analizar métrica y rima de Consumación