Nombre: Delmira AgustiniNacimiento: Montevideo, 24 de octubre de 1886Muerte: Montevideo, 6 de julio de 1914Nacionalidad: UruguayBiografía de Delmira Agustini
Poemas de Delmira Agustini
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El anillo >> Poesías
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Nocturno >> Poesías
Íntima >> Poesías
El vampiro >> Poesías
Mis amores >> Poesías
El surtidor de oro >> Poesías
Ceguera >> Poesías
Los relicarios dulces >> Poesías
Las alas >> Poesías
El intruso >> Sonetos
Desde lejos >> Sonetos
Una viñeta >> Sonetos
Otra estirpe >> Sonetos
Por tu musa >> Sonetos
Lo inefable >> Sonetos
Por campos de ensueño >> Sonetos
Fue al pasar >> Sonetos
Mi musa >> Sonetos
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Elegías dulces >> Sonetos
Tu boca >> Sonetos
La musa >> Sonetos
La barca milagrosa >> Sonetos
La cita >> Sonetos
Tu dormías >> Sonetos
Amor >> Sonetos
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Luz púrpura con tu retrato >> Sonetos
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El nudo >> Sonetos
Tu amor >> Sonetos
El arroyo >> Sonetos
La estatua >> Sonetos
Poesías de Delmira Agustini preferidas de nuestros lectores
Amor
Las alas
Lo soñé impetuoso, formidable y ardiente;
hablaba el impreciso lenguaje del torrente;
Era un amor desbordado de locura y de fuego,
Rodando por la vida como en eterno riego.
Luego soñélo triste, como un gran sol poniente
que dobla ante la noche su cabeza de fuego:
despues rió, y en su boca tan tierna como un ruego,
sonaba sus cristales el alma de la fuente.
Y hoy sueño que es vibrante, y suave, y riente y triste,
que todas las tinieblass y todo el iris viste,
que frágil como un ídolo y eterno como un Dios
Sobre la vida toda su majestad levanta:
y el beso cae ardiendo a perfumar su planta
en una flor de fuego deshojada por dos...
Yo tenía... ¡dos alas!...
Dos alas,
que del azur vivían como dos siderales
¡raíces!...
Dos alas,
con todos los milagros de la vida, la Muerte
y la ilusión. Dos alas.
fulmíneas
como el velamen de una estrella en fuga;
dos alas
como dos firmamentos
como tormentas, con calmas y con astros...
¿Te acuerdas de la gloria de mis alas?...
el áureo campaneo
del ritmo; el inefable
matiz atesorando
el Iris todo, más un Iris nuevo
ofuscante y divino.
que adorarán las plenas pupilas del futuro
(¡Las pupilas maduras a toda luz!)... el vuelo...
El vuelo ardiente, adorante y único,
que tanto tiempo atormentó los cielos,
despertó soles, bólidos, tormentas,
abrillantó los rayos y los astros;
y la amplitud: tenían
calor y sombra para todo el mundo,
y hasta incubar más allá pudieron.
Un día, raramente
desmayados a la tierra,
yo me adormí en las felpas profundas de este bosque...
¡Soñe divinas cosas!...
Una sonrisa tuya me despertó, paréceme...
¡Y no siento mis alas!
¿Mis alas?...
-Yo las vi deshacerse entre mis brazos...
¡Era como un deshielo!